Duatlón de La Vall de Núria: Disfrutando de la alta montaña

Antes de empezar con buena cara: Iván, yo y Juan

   (JAVI) Sí, ya sé que me repito, pero es que la Duatlón de la Vall de Núria, mola!!!

   Desde hace algunos meses no tengo tanto tiempo para entrenar y las competiciones en las que puedo participar son contadas (un mocoso de 1 añito es el responable).  Pero la Duatlón de La Vall de Núria es un fijo en la quiniela.  Sea como sea, hay que hacerla!

   Y allí estábamos, mi hermano Juan, Iván (un amiguete que se apunta a un bombardeo) y yo.  Domingo 5 de octubre a las 7:30 de la mañana.  Como siempre, vamos tarde, siempre corriendo para dejar las cosas de la transición de btt a running en el camión que nos lo lleva a Fontalba... así no vamos bien...

   8:00h se dá la salida; vamos buscando nuestro sitio y ritmo en la carrera.  Hace mucho tiempo que no cojo la bici de montaña y el camino solo va para arriba, sin descansos.  Hay que dosificar, queda mucha carrera y uno no está todo lo "fino" que quisiera...

Subiendo Puigmal

   Después de 11km de btt, nos calzamos las bambas y a subir el Puigmal: esa montaña -para mi- mágica, que conozco tan bien y que pone a cada cual en su sitio.  Son 4,5 km de subida con 900 metros de desnivel positivo.  Mi intención es seguir dosificando esfuerzos, no dejarme llevar por la emoción de la carrera, disfrutar de ella y del paisaje.  Llegamos a casi 3.000 metros de altitud y corono el Puigmal, hay nieve y la temperatura es de unos 3 grados positivos (qué suerte! Todavía en positivo).  Hasta el momento ha sido duro, los cuádriceps los tengo reventados, pero aun me queda gasolina para bajar a Núria.  Me encanta esa bajada, es algo más de 30' en los que disfruto dándole caña a las piernas, dejándolas rodar, saltando y adaptándome al terreno como puedo mientras cruzo riachuelos, corro al lado de precipicios, y comento algo de pasada con corredores que están disfrutando tanto como yo. 

   En Núria hay otro avituallamiento.  Me refresco un poco, como, y estiro todo lo que puedo; queda poco, pero aun hay un tramo chungo.  El primer tramo corriendo de Núria a Fontalba, también tira para arriba.  Ahí me veo obligado a hacer una para técnica para estirar y relajar de nuevo mis maltrechos cuádriceps; llevo más de tres horas de carrera y lo estoy notando.  Me pasan tres o cuatro corredores mientras me recupero.  Pero nunca lo dudo: vale la pena parar a tiempo antes de "petar" por completo.  Cuando consigo recuperarme, no solo recupero las posiciones que había perdido, si no que además tengo fuerzas para adelantar a 3 corredores más. Valió la pena dosificar y parar a estirar ;)

Subiendo Puigmal

   Llego otra vez al avituallamiento de Fontalba.  Cojo de nuevo la bici y a bajaaaaaaaar! Algunos pensarían que ya está todo hecho y que esos 11 km de bajada ya son de propina.  Ni mucho menos!!  Debes de estar atento porque alcanzas altas velocidades debido al gran desnivel que hay y la pista no está en las mejores condiciones como para fiarte y dejarte llevar.  En 2 participaciones que llevo en esta prueba ya he visto dos accidentes, uno se saldó con fractura de clavícula y el otro con unos cuantos golpes y rascadas que tardará en olvidar.

   Por fin meta!! Sano y salvo!! Total 4h42'.  Allí me espera Juan que se ha pegado 4h29'.  Un tiempazo para los que no somos "pros".  Iván llega un poco más tarde; se ha detenido para ayudar a un corredor que se cayó bajando con la bici.  Por suerte, en la montaña hay mucha solidaridad y compañerismo.

   Poder disfrutar de nuestro deporte en un entorno privilegiado; y sabiendo y conociendo en todo momento cuál es nuestro estado de forma para marcar nuestro objetivo real que no incluya sufrimiento, lesiones ni accedentes.  A esto es a lo que aspiramos, y por ello trabajamos.

   Y sobre todo no olvides hacerte una prueba de esfuerzo una vez al año; hay que tener el máximo de variables controladas para evitar disgustos.  Las pruebas de montaña de larga distancia no son ninguna tontería!

   Hasta la próxima! Que espero sea pronto ;)

(JAVI)